Dos chicas calientes se ponen ocupadas, una rubia y una morena, con cuatro brazos hacia el agujero de la otra, jugando con sus cuerpos con cuatro manos. El POV memoriza cada momento de extrema totalidad y lujuria inolvidable por el placer, su deseo insaciable, su necesidad interminable en un estado de deleite cauteloso, porque de otra manera se volvería terriblemente agrio o terminaría terriblemente.