Chloe y su hermanastro Kenzie tienen una de las rutinas especiales del día de San Valentín; hacen lo que más quieren, que no se supone que deban hacer. Ella es pequeña con sus pequeñas tetas firmes expuestas, él puede frotarla efectivamente mientras ella lo monta, ofreciendo un beso apasionado que lleva a la acumulación final.